No duele mi hijo...!
Se calcula que en Bolivia hay más de 2.000 criaderos dedicados especialmente a los gallos de pelea, con varios centenares de cabezas por granja. Los galleros rurales suelen tener como mínimo veinte ejemplares. La riña es una de las actividades de fin de semana que más público convoca en ciudades como Santa Rosa de Yacuma, en el departamento de Beni. Los defensores de las riñas dicen que es una tradición ancestral del pueblo boliviano. Para otros, es una herencia de los conquistadores. Lo cierto es que el alegato de la tradición, junto con las ganancias que proporcionan, ofrece una resistencia ruidosa contra los intentos fallidos de las sociedades protectoras de animales para que se las prohíba. Y si bien hay un proyecto de Ley General para la Defensa de los Animales, este no contempla el sacrificio de animales en rituales andinos (wilanchas).
Texto: Paula Brecciaroli
Para: Revista Brando